Invocación a la Virgen y a los Santos

Y también se dirigen a la Virgen y a los Santos, para participarlos de la fiesta y pedirles su acompañamiento.

Invocación a la Virgen y a los Santos

Sabemos que Jesús nos reveló la Verdad. Para que llegue hasta nosotros creó y confió a su Iglesia el conservar el depósito de la Fé, para conducir a todos los hombres mediante el resplandor de la Verdad del evangelio, a la búsqueda y acogida de su amor. Para tal misión se valió de testimonios de vida.

En la Anunciación, María le responde a Dios:
¨He aquí la esclava del Señor: hágase en mí según tu palabra¨ y se entregó a sí misma por entero a la persona y a la obra de su hijo.

Como testigos del Resucitado, los apóstoles son las piedras de fundación de su Iglesia, pero no solamente ellos: Pablo habla claramente de más de quinientas personas a las que se apareció Jesús en una sola vez.

La forma en que se alegraron, defendieron y propagaron la Palabra con su vida, no solo las primeras comunidades cristianas, sino también los santos a lo largo de la historia, nos lleva a pensar en ellos también como nuestra familia, a quienes queremos invitar y solicitar su acompañamiento, especialmente a los santos cuyo nombre lleva cada niño.

Letanías a los Santos

Guía: Así como los niños necesitan de una familia para crecer y desarrollarse, también necesitan de la Iglesia, que es la familia de los hijos de Dios, para que su fe pueda crecer y profundizarse. Por eso ahora vamos a rezar a los santos, nuestros hermanos mayores y modelos en la fe por estos niños, respondiendo a cada invocación: Ruega por nosotros

Celebrante:
Santa María, Madre de Dios Ruega por nosotros
San Juan Bautista Ruega por nosotros
San José Ruega por nosotros
San Pedro y San Pablo Rueguen por nosotros
San Pedro González Telmo Ruega por nosotros
(pueden añadirse los santos correspondientes a los nombres de los bautizandos)
Todos los santos y Santas de Dios Rueguen por nosotros